Centro de belleza

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Del caos a la calma en un instante. La reforma de una vivienda, que pasó por una total redistribución y acotación de espacios, para convertirse en un centro de belleza, buscaba crear un santuario de relax y bienestar con el carácter de un apartamento privado.
Personalizamos butacas, sillas y taburetes con el objetivo de proporcionar la máxima comodidad, al tiempo que reforzamos el carácter doméstico de un espacio en el que sentirse como en casa.

Tanto las piezas a medida como el resto del mobiliario parten de un estudio a fondo de los servicios ofrecidos y de los requerimientos para llevarlos a cabo. Las soluciones de almacenaje, las mesas de manicura o la tarima de pedicura responden a esas necesidades y se diseñaron especialmente para este espacio, unificando un estilo y haciendo que en todo momento hablaran el lenguaje propio de todo el proyecto.
Los paños de las paredes están tratados con un panelado con dos acabados distintos, madera oscura y lacado en blanco, mientras que el mismo desarrollo se trabajó en los parabanes acristalados que acotan y definen las estancias.

El proyecto también se inspira en la proporción áurea, adaptándola en rectángulos que se repiten en toda la planta, que se justifican en columnas y crean separaciones y rellenan superficies. Las cortinas vaporosas suavizan la proliferación de rectángulos al tiempo que tamizan la luz y las miradas, creando espacios íntimos de relax.

Entrar en este centro de belleza es entrar en un ambiente armónico y balanceado, donde la serenidad de la belleza se muestra en una paleta de color suave en tonos grises y azulados. Siguiendo esta línea calmada seleccionamos materiales sobrios como el mármol o la madera, que comparten protagonismo con una estudiada iluminación. En la zona spa, un mural ocupa toda la pared, llevándonos a un territorio sensorial y onírico.